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martes, 27 de septiembre de 2016

LAS OBRAS DE MISERICORDIA CORPORALES Y ESPIRITUALES

COMPARTIR CUALIDADES

La obra de Misericordia Espiritual “Enseñar al que no sabe” me ha hecho pensar  que más que de enseñar deberíamos hablar de compartir, porque todo el mundo participa de la sabiduría y de la ignorancia. Convirtiendo el dinero o los talentos de la parábola en cualidades, nos damos cuenta de que hay que potenciarlas y ponerlas al servicio de los demás: <<El Señor le respondió: “Eres un siervo negligente y holgazán. ¿Con que sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues deberías haber puesto mi dinero en el banco, para que, al volver yo, pudiera recoger lo mío con los intereses. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará. Pero al que no tiene, se le quitará hasta lo que tiene>> (Mt 25,26-29). Así, pues, toda persona tiene cualidades que puede mostrar y compartir con otros.

Nuestra sociedad, tan plural y con personas tan faltadas de todo, ha generado iniciativas: unas desde las instituciones, otras desde entidades como Cáritas, y también de particulares para acompañar, mediante el aprendizaje, los procesos de acogida y de integración, sobre todo de personas recién llegadas que no conocen ni la lengua ni las costumbres de aquí. Así han surgido grupos de alfabetización de adultos, aulas de acogida para jóvenes, actividades de refuerzo escolar para niños, aulas de acogida exclusivas para mujeres donde se combina la alfabetización con el idioma y con lo que puede facilitar y hacer más digno el día a día. En muchos municipios se promueven parejas lingüísticas para la práctica y aprendizaje de nuestro idioma y también los bancos del tiempo, entre otras muchas iniciativas de este tipo. Debemos agradecer al Papa Francisco que nos haya animado a desempolvar las obras de misericordia, porque sin ser consciente de ello, muchas personas llevan tal vez años ejercitándolas.

ORACIÓN

Padre, gracias por los dones que nos has dado, fruto de tu generosidad con nosotros, Ayúdanos a trabajar para hacerlos crecer y poder ponerlos al servicio de nuestros hermanos y hermanas que más lo necesiten. Padre, confiamos en tu misericordia cuando no te somos lo bastante fieles porque dejamos de atender las necesidades de los demás.

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